martes, 18 de octubre de 2011

¿Existe?

¿Existe enamorarse? Hace tiempo, esta pregunta insistía en salir de mi mente, llegar al lado consciente y pensante, ese mismo lado pensante desechaba el planteamiento, me asustaba llegar a una conclusión con la que tendría que cambiar toda la perspectiva de mi vida. En lo que había creído, con lo que había vivido ilusionada. Ilusionada, aquí espantaba tal pensamiento porque mi pregunta, cuando llegaba a éste punto: ilusión… era siempre la misma ¿Qué es la ilusión? Un sueño, un concepto  creado por nuestra imaginación y que los sentidos confunde… aquí concluía todo, me negaba a continuar ¿Es únicamente esto?.
Hay algo más, tiene que ser algo más que un razonamiento lógico. Sucede algo que escapa a nuestra comprensión, inexplicable; que hace pierda importancia el hecho de que podamos confundir la ilusión con la alucinación y la ilusión sea provocada porque sí es posible enamorarse y no al revés.
Puede, que solo ocurra cuando sentimos que no podemos ser felices si no estamos enamorados de alguien –me decía-. Porque soy feliz (y digo, soy no solo estoy) y aún sin estar enamorada y a pesar de no tener cerca un hombre al que amar y me ame... Soy feliz. Situación, por otro lado, que no es opuesta.
Distinto es el enamoramiento, que puedes sentirlo, precisamente, cuando te empeñas en buscar la felicidad en otra persona. Si te empeñas en encontrar tu felicidad fuera… encontraras de lo que tengas necesidad en ese instante, por tanto nacerá una relación sin perspectiva. Si lo que sientes necesitas es sexo, lo que vendrá será eso, una vez satisfecha tu necesidad… no durará, surgirán una sucesión de relaciones e insatisfacción por sentir no es suficiente. Si lo que sientes necesitas es alguien que te mime, una vez satisfecha esa necesidad no querrás más de ello y así en cualquier necesidad que creas ha de satisfacer una pareja. Estas relaciones son y terminan siendo dependientes y por esta consecuencia, no satisfactorias para ambas partes, porque no hay un equilibrio individual, ni en común.
Por tanto… la conclusión es fácil, puedes llegar a enamorarte de verdad si ya eres feliz antes de ello. Porque encontrarás esa persona afín a ti, sin llevarte a equívoco por la pretensión de tener a alguien a tu lado. Solo porque lo encuentras. Así es, te enamoras porque deseas estar con esa persona que te hace entender tu realidad con más intensidad, no porque necesites estar con… alguien, porque ya te sientas completo, no necesitas ¿Es una contradicción? no, creo que no.
De esta manera puede surgir una relación más placentera, pueden crecer las dos personas y, esto llevar a enriquecerse mutuamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario